martes, 22 de abril de 2008
Respiración
A veces respiras demasiado rápido y entonces todo te parece más difícil, más loco; otras encuentras el espacio para respirar tranquilo y la mirada se te ilumina, surgen planes, ideas, gentes.
Aprovecha, respira con calma y disfruta de todo lo que te trae, así será más fácil que te acuerdes de ello cuando, sin darte cuenta, te descubras de nuevo respirando deprisa.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
2 comentarios:
Qué bueno, Pablo. Y la foto de la entrada de ayer me parece excelente.
Decía mi maestro de meditación, que lo único que siempre llevas contigo, y a lo que puedes echar mano siempre que lo necesites, es tu respiración...
Magnífica reflexión... un saludo...
Publicar un comentario